sábado, 28 de febrero de 2009

El heroe de Lazcao


Joder, por donde empezar...
Cuando vi la noticia, dije, pobre hombre, lo tiene crudo, se jodió la vida, lo van a matar...
Lo más probable es que él, mejor que nadie, supiese a lo que se exponía cuando cogió el mazo y con un par se dijo, os vais a enterar HIJOS DE PUTA (así, con todas las letras y en mayúsculas, porque no tienen otro calificativo) ahora os toca a vosotros probar de vuestra propia medicina; por eso para mi es un héroe, porque aun sabiendo los riesgos que corría siguió adelante, hizo lo que muchos de esos "españolitos" que les encanta ir de manifestación en manifestación defendiendo no sé que cojones de la unidad territorial (debe tratarse de aquello de la una, grande e indivisible... que pena, y que miedo... ), escudados en una bandera de España, no tendrían valor para hacer aun viviendo mil vidas;
Digan lo que digan los políticos de turno (siempre midiendo las palabras, para ser "políticamente correctos" (jajaja, perdonen que me ría), no les vayan a tachar de fascistas, y lo que es peor, en las próximas elecciones pierdan un mísero voto, que les haga alejarse del escaño al que se agarran como si les fuese la vida en ello), de este país que cada día que pasa me da un poco más de asco y vergüenza, este hombre ha hecho lo que ninguno tenemos huevos a hacer, pero en el fondo todos estamos deseando.
¿Saben qué creo que habría sido lo correcto? Que todos los ertzaintzas que fueron a detenerlo, con un par, se despojasen de los pasamontañas (que no olvidemos llevan por miedo a que les reconozcan), y arrimando el hombro, con mazas en la mano, hubiesen echado abajo esa y las miles de herriko tabernas que siembran el país vasco de miedo y odio.






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